ACCIONES DE ENEL DISTRIBUCIÓN PERÚ: PERSPECTIVAS 2025

Durante 2025, las acciones de Enel Distribución Perú (ENDISPC1), una de las principales empresas del sector eléctrico del país, serán evaluadas con lupa por inversores institucionales, minoristas y analistas especializados. Este año marcará un punto de inflexión por diferentes razones estructurales y coyunturales que conviene detallar para anticipar su posible rendimiento en bolsa y comprender su posición en el entorno macroeconómico del Perú.

Enel Distribución Perú cotiza en la Bolsa de Valores de Lima (BVL) y forma parte de diversos índices representativos del mercado local. Su acción es considerada defensiva, dada su exposición al sector eléctrico, y se caracteriza por una baja volatilidad, atractiva para inversores de perfil conservador o de ingresos.

Durante el primer semestre de 2025, las acciones de la compañía mostraron una apreciación moderada, impulsadas principalmente por los siguientes factores:

• Estabilidad tarifaria: Las tarifas regulatorias del sistema eléctrico se mantuvieron relativamente constantes, protegiendo los márgenes de rentabilidad de la empresa.
• Demanda sólida: El consumo eléctrico en Lima Metropolitana y zonas aledañas experimentó un crecimiento sostenido, beneficiando directamente a Enel Distribución Perú, al ser la principal distribuidora en esa región.
• Dividendos consistentes: La empresa continuó mostrando una política de distribución de utilidades atractiva, lo que incentivó la demanda por su acción en momentos de inflación controlada.

No obstante, el mercado también ha ponderado algunos elementos de cautela:

• Riesgos regulatorios: Proyectos de ley y debates sobre la reforma del sector eléctrico podrían afectar el marco operativo de las empresas distribuidoras.
• Movimientos de tenencia: Durante el año pasado, Enel Italia anunció sus intenciones globales de reorganizar activos en América Latina, lo cual generó cierta expectativa sobre posibles ventas o reestructuraciones.

Desde una perspectiva técnica, la acción se ha mantenido en una banda estable entre S/5.10 y S/5.60 durante gran parte de 2025. El volumen de operaciones es relativamente bajo en comparación con otros sectores, lo que subraya su naturaleza de inversión pasiva o de sostenimiento.

Para el cierre del año, analistas del sector energía proyectan una rentabilidad total (incluyendo dividendos) entre 6% y 8%, en línea con retornos históricos.

Enel Distribución Perú en 2025 enfrenta una combinación de factores positivos y desafíos que determinarán su comportamiento bursátil y operativo. Comprender estos drivers fundamentales y los posibles riesgos regulatorios, macroeconómicos y operativos es esencial para una evaluación integral.

Principales impulsores del desempeño

• Crecimiento económico de Perú: La reactivación moderada de la economía nacional, con un PBI proyectado en torno al 3%, favorece una mayor demanda eléctrica empresarial y residencial.
• Expansión de redes: Enel Distribución Perú viene ejecutando un plan de inversión enfocado en expansión de la infraestructura de distribución, con montos anuales superiores a S/500 millones, lo que permitirá incrementar su base de clientes y mejorar la calidad del suministro.
• Gestión operativa eficiente: La empresa ha logrado mantener bajos niveles de pérdidas técnicas y comerciales, situándose entre las distribuidoras más eficientes del país.
• Transición energética: Si bien la empresa se dedica principalmente a la distribución, su matriz Enel ha reforzado su apuesta global por energías limpias, lo que podría impulsar proyectos asociados o mejorar su percepción ESG (ambiental, social y de gobernanza).
• Estabilidad del tipo de cambio: Un sol peruano relativamente estable frente al dólar favorece los costos y evita impactos negativos sobre inversiones importadas.

Riesgos relevantes

• Incertidumbre política: Aun con cierta calma política en los primeros meses de 2025, persiste el riesgo de medidas imprevistas o populistas que afecten la rentabilidad del sector eléctrico.
• Cambios regulatorios: Las discusiones en el Congreso sobre modificar la estructura tarifaria o imponer mayores cargas fiscales al sector podrían impactar directamente la rentabilidad de las distribuidoras.
• Concentración geográfica: La alta dependencia de Lima Metropolitana como mercado principal expone a la empresa a variaciones regionales más marcadas si se produjeran cambios de consumo o disturbios sociales localizados.
• Bajo volumen negociado: Pese a ser una empresa sólida, el bajo interés especulativo limita la liquidez del papel, lo que puede dificultar entradas/salidas masivas de capital.
• Retiro de la matriz: Potenciales desinversiones de Enel en Latinoamérica podrían generar incertidumbre en el mercado local respecto al futuro accionario y a la estrategia de largo plazo.

Para los inversionistas, entender estos factores permitirá tomar decisiones mejor fundamentadas al momento de incorporar ENDISPC1 a sus portafolios, ya sea como acción de rentabilidad por dividendo o como parte de una estrategia de diversificación defensiva en renta variable peruana.

Mirando hacia 2026, las expectativas para Enel Distribución Perú dependerán en gran medida de la evolución regulatoria en el contexto local, la dinámica de consumo interno y, en especial, las estrategias de inversión futuro que pueda implementar la empresa. Si bien su modelo de negocio ofrece características de estabilidad, algunos elementos nuevos podrían modificar este equilibrio esperado.

Expectativas para el entorno operativo

• Actualización tarifaria: Se espera que en 2026 se revisen los pliegos tarifarios que definen los ingresos regulados que puede obtener la empresa. Este proceso puede alterar los márgenes operativos dependiendo de cómo se regulen las inversiones reconocidas.
• Transformación digital: La adopción progresiva de medidores inteligentes y sistemas de monitoreo permitirá mejorar la eficiencia operativa y la respuesta ante interrupciones, generando fuentes de valor adicional.
• Inversiones en infraestructura: Los planes de expansión hacia nuevos sectores residenciales en crecimiento como Lima Norte y Lima Este podrían incrementar la base de clientes sustancialmente.

Posibles catalizadores de mercado

• Reorganización corporativa: Un eventual proceso de venta o reorganización del portafolio del grupo Enel en Perú podría abrir la puerta a nuevos socios estratégicos o inversores institucionales de largo plazo.
• Mayor enfoque ESG: Los criterios de sostenibilidad cobrarán relevancia creciente entre los inversores, y el alineamiento de Enel Distribución con estándares internacionales podría ampliar su atractivo como opción de inversión responsable.
• Potencial fusión o revalorización sectorial: Cambios futuros en la estructura del mercado eléctrico peruano podrían abrir espacios para consolidaciones o paquetes de estímulo a la infraestructura que beneficien a empresas como Enel Distribución.

¿Qué mirar en 2026?

Los analistas recomiendan observar con atención los siguientes indicadores clave a lo largo de 2026:

• Evolución de la tarifa media por usuario y su ajuste regulado.
• Nivel de pérdidas de energía en el sistema propio.
• Montos de inversión ejecutados y anunciados.
• Índices de calidad de servicio (SAIDI, SAIFI).
• Rendimiento en bolsa y política futura de dividendos.

En resumen, Enel Distribución Perú continuará siendo una acción defensiva relevante en la plaza limeña, con proyecciones estables pero sujetas a eventos regulatorios y estratégicos que podrían alterar su perfil de retorno esperado. Su rol dentro de carteras de bajo riesgo o de ingresos lucirá consistente, siempre que no se materialicen riesgos regulatorios o corporativos de gran impacto.